lunes, 28 de marzo de 2011

Miedo.

¿Sabes lo qué es sentir miedo? Todo el mundo lo ha sentido alguna vez… Miedo a quedarse solo aun estando rodeado de gente, miedo a que te engañen, te mientan o te defrauden. Miedo a no dar lo que se espera de ti, miedo a perder todo aquello que quieres, miedo a esperar algo que a lo mejor nunca llega y a que se te borre la sonrisa de la cara. Miedo al amor, a los payasos, a la pérdida, al rechazo, a la soledad, a las arañas o a los aviones. Hay muchas clases de miedo y cada uno intenta superarlo como puede, pero yo tengo un antídoto… ¿Sabes cuál es? Tu sonrisa. Después ningún miedo es lo suficiente valiente como para hacerme un nudo en el estómago y si se cree capaz de conseguirlo tiene la batalla perdida porque es sabido de aquí a la luna que si tengo tu sonrisa soy la más fuerte del mundo así que los sacaría a patadas y luego me tomaría un batido. De chocolate. ¿Y para comer? ¿Qué te parece los lunares de tu espalda?

Y ahora los miedos se esconden debajo de la cama.
Y tú y yo nos tumbamos encima.

jueves, 3 de marzo de 2011

Tú y tus estúpidos juegos.

No sé si te acuerdas, no sé si deberías acordarte… Sólo sé que aquel día estaba totalmente destrozada y que lo único que quería era llorar. No te imaginas el bien que me hiciste sin darte cuenta, o tal vez sí que lo sabías y por eso lo hiciste (sí, eso es más típico en ti). Sólo recuerdo que no había manera de sacarme una sonrisa, que lo único que quería era desaparecer e inundar mi cama en lágrimas, contarle a mi almohada que quería huir al algún lugar perdido y gritarle a mis paredes que todo era una puta mierda pero tú conseguiste hacerme reír como si nada importara. Tú y tus estúpidos juegos. Y entonces fue cuando me di cuenta: no me importaba nadie más que no fueras tú, no quería que otra persona tuviera ese efecto en mí, no quería perderte… Sólo quería pasarme el resto de mi vida en cualquier banco, sentada a tu lado, jugando a cualquier cosa que se te ocurriera, sintiendo tus pestañas en mi mejilla, tu brazo en mi hombro o tu mano en mi nuca… Olvidando todo lo que nos rodea y sonriendo por tenerte tan cerca.